En una tarde idílica para los amantes del buen calor, comenzó una nueva aventura, que seguramente constituyó el primer capítulo de una nueva serie de carreras que se seguirán llevando a cabo en el futuro.
La gente de Maroñas Entertainment nos proporcionó una excelente carrera, cuidando hasta el más mínimo detalle, de principio a fin.
Desde una amplísima cobertura por TV en vivo con una infinidad de cámaras, algo casi insólito para este tipo de eventos, hasta las botellas personalizadas de agua, con la etiqueta del evento.
Nada quedó librado al azar, los accesos, el estacionamiento, el palco, la zona de corredores, la entrada en calor, la largada, llegada, estiramientos, etc, etc.
Los burreros de ley vieron invadido su territorio por varias horas, por esta curiosa horda verde que entraba, salía y circulaba por todos los rincones del santuario principal del deporte de los reyes.
Largada y relatos al estilo típico maroñense, como así también la llegada, según cuentan los testigos. Por las pantallas de los propios recintos internos se podía seguir en detalle todo el transcurso de la carrera.
Con respecto al circuito, a pesar de disponer de una hidratación más que aceptable, el calor se hacía sentir, especialmente en aquellos diversos tramos en repecho con ausencia total de sombra.
El tramo final dentro del espeso bosque, nos recordaba ciertos pasajes de Anchorena en aquella ya lejana Maratón de Colonia 2006. Este constituía la antesala inmediata de aquél remate final dentro de la propia pista de arena.
La pista se sentía muy extraña al tacto (o mejor dicho al paso), no era ni correr por la playa ni correr por balastro, tierra ni nada semejante a experiencias anteriores.
Esa prolija pista (aunque se transitaba por la senda auxiliar interior), se asemejaba más a una pista de Tartán que a una corrida por las arenas de una playa perfectamente plana.
La arena parecía ser muy fina, pero estaba muy compactada, lo que la hacía muy curiosa y agradable para correr.
Un tramo intermedio recorriendo un trillo sobre pasto algo descuidado, entre el propio bosque y la pista, aportaba un ingrediente adicional, casi al "estilo Perrin".
Por consiguiente la carrera tuvo de todo, tal cual lo prometía el folleto: arena, calles, avenidas, repechos, bosque, pasto y otra vez arena.
Los acompañantes, más allá de lo tedioso que puede resultar la demora en el retorno de los atletas, estaban cómodamente instalados a la sombra, con un sinfín de servicios a su entera disposición.
Para este evento se dieron cita diversos Cuervos. Camuflados entre la multitud, se podía identificar a Hugo, Gonzalo, José Luis, Gustavo, Lionel y Daniel, en ese preciso orden "cruzaaaaaron el discooooo", con los siguientes tiempos netos:
Hugo Martino: 00:45:03
Gonzalo Álvarez: 00:45:20
José Luis Barbería: 00:45:50
Gustavo Martino : 00:53:53
Lionel Lorenzo: 00:55:28
Daniel Caffarena : 01:00:04
Por supuesto que para el Sprint final Samsung, impecablemente controlado por Kronos, cualquiera de estos pingos pagaría una fortuna de dividendo, no eran para nada "favoritos", ni "enemigos", ni la "sorpresa".
Aunque nos hubiéramos escondido como el lobo de Caperucita, agazapados en el bosque durante todo el rato, para luego salir como un viento a buscar ese LCD, totalmente fresquitos, era imposible llegar a un guarismo que nos permitiera siquiera figurar entre los 100 primeros. Era un terrible desafío accesible solo para unos pocos elegidos.
Este asunto fue algo que uno de nuestros Cuervitos no llegó a entender bien del todo, el cual aparentemente daba ya por descontado que el LCD estaba allí esperándonos justo a nosotros.
Le costó bastante volver a dirigirnos la palabra luego de encontrarnos en la llegada y constatar que el LCD no venía bajo nuestro brazo.
Si este evento se repitiera en el futuro, seguramente contará con una participación mucho mayor que en ésta, donde apenas se superaron los 1300 arribos a la meta.
Las ventanillas de entrega de Chip ya acusaban esta situación, curiosamente se veían despobladas, incluso sin gente que las atendiera, para los últimos rangos asignados.
De todas formas, el volumen de corredores estuvo acorde con la posibilidades que nos brindaban las instalaciones habilitadas. Tal vez si se hubiera completado el cupo previsto de 3000 atletas, la situación no hubiera sido la misma, a pesar del buen desempeño del numeroso staff anfitrión.
Felicitaciones a la gente de Maroñas Entertainment, por haberse animado a incursionar en este terreno tan extraño para ellos, creando un evento que a la postre aprobaron con una muy buena nota, ya en su primer edición.
Que se repita !!!
Para acceder a todas las fotos cuervas (más de 100!!!) de este evento, hacer click aquí.
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